martes, 5 de marzo de 2013

El pescador y el milagro

Érase una vez en el puerto de Motril un pescador egoísta que no tenía amigos lo único que le importaba era el dinero. Un día salió a pescar pasó la noche y atracó en el puerto, llegó con el barco cargado de pescado: sardinas, arenques, boquerones etc...
Ese mismo día fué al mercado dónde un hombre le daba ¡80.000 euros! Sin pensarlo dos veces le vendió el pescado. Al día siguiente pensó que si compraba un arpón pescaría ballenas lo que ganaría mucho dinero, porque la piel de ballena es muy valiosa. Se compró el arpón y al día siguiente salió a pescar pero nada no pescaba nada y así pasaron los días hasta que, llegó un día de niebla donde encontró una ballena de blancas pieles y ojos azules como el mar. Cuando la alcanzó empezó a oírse un canto, era un canto agudo como de una diosa. Vió una sombra a lo lejos saltaba en el agua parecía que se dirigía hacia su barco cuando se acercó lo suficiente como para verla se dió cuenta de que, ¡era una sirena! le rodearon se le cerraron los ojos, y cuando los abrió estaba en una cueva en una isla desierta. Se escuchaban los cánticos de las sirenas más allá de la piedra de la cueva intentó escapar pero estaba atado con una cuerda miró a sus lados y ¡haaaaaaaaaaaaaaaaaaaa,! al lado suya habían dos esqueletos ahora quería escapar con más razón quién sabe lo que le habrían echo a esas dos pobres personas, al lado suya había una cuchilla la cogió y cortó las cuerdas
mientras subia escalando la roca una sirena le agarró la pierna y se le cerraron los ojos. Despertó y al aire dijo: señora si me sacas de aquí seré amable y respetaré el mar. La VIRGEN DE LAS AZUCENAS se aparecíó delante de él y le dijo: te voy a llevar a Motril pero recuerda lo que has prometido. Sin dudarlo dijo: si ...  lo haré. Se durmió y cuando abrió los ojos se encontraba en Motril, corriendo fué a compartir el dinero que había ganado de la pesca de hace una semana y todos fueron felices  y pescaron mucho



                                                                        ANÉDOTA


                                                 

                                  Comparte todo lo que tienes si quieres que ellos compartan también.



No hay comentarios:

Publicar un comentario